El 17 de junio se celebra el Día Nacional de Islandia, el día de su independencia de Dinamarca y por tanto la constitución de la república, que tuvo lugar en 1944. Todo el país lo celebra con mucho orgullo, decoran las calles con la bandera nacional y la gente viste los trajes típicos tradicionales.
Este año, debido a la situación «covid«, se pretendía que los actos no fueran tan multitudinarios, pero el buen tiempo ha hecho que las calles se hayan llenado de ambiente y alegría. El día empezaba en la plaza Austurvöllur con la ceremonia oficial, la ofrenda floral y los discursos de las autoridades, seguido después por el desfile de banderas y banda de música hasta el cementerio para rendir homenaje a Jón Sigurðsson, líder de la independencia. A partir de ahí, multitud de actos callejeros, mini teatro, circo, música, dispersos por la ciudad, en las calles, en los parques, especialmente en Hljómskálagarður y Klambratún, donde además había varios food trucks. Como guinda, la compañía de helicópteros Norðurflug ofrecía vuelos cortos sobre la ciudad a un precio más reducido del habitual. Mi primer vuelo en helicóptero, con un tiempo y una visibilidad excepcional!! (Por lo visto, muy poco usual en el día nacional, ya que siempre suele llover). Ver Reykjavik desde el aire es una experiencia insuperable!